No sé el porqué pero mi comentario ha salido mutilado.
Sigo.
Cuando era cría,robaba pámpanos con mi pandilla. Los cogíamos de unas parras, saltando una tapia con más miedo que vergüenza. Ahora los recuerdo amargos y nada apetitosos, pero entonces eran algo mágico. Y lo eran de verdad, nunca nos pillaron, no nos abrimos la cabeza, ninguno tuvo cólicos y, puede ser que hasta nos hicieran, solamente por esos días, inmortales.
30:::junio:::2011 at ''17:09''
Un patio, una parra, una sombra, una siesta, la merienda, el verano…
Me gustaMe gusta
30:::junio:::2011 at ''18:50''
mmm… (:
Me gustaMe gusta
1:::julio:::2011 at ''8:25''
A mí me evoca la pereza, sentarse sin prisa a leer, a charlar, a compartir vino.
El tiempo se dilata y se enlegaña. No hay que producir, por ahora.
Me gustaMe gusta
2:::julio:::2011 at ''12:40''
Me recuerda un enclave, una isla que hay junto a una autovía, ¿la has visitado? Su encanto radica en el contraste.
Me gustaMe gusta
2:::julio:::2011 at ''17:55''
¿Habéis comido pámpanos?
Me gustaMe gusta
2:::julio:::2011 at ''18:11''
No sé el porqué pero mi comentario ha salido mutilado.
Sigo.
Cuando era cría,robaba pámpanos con mi pandilla. Los cogíamos de unas parras, saltando una tapia con más miedo que vergüenza. Ahora los recuerdo amargos y nada apetitosos, pero entonces eran algo mágico. Y lo eran de verdad, nunca nos pillaron, no nos abrimos la cabeza, ninguno tuvo cólicos y, puede ser que hasta nos hicieran, solamente por esos días, inmortales.
Cualquier día vuelvo a robar.
Me gustaMe gusta
3:::julio:::2011 at ''6:30''
nunca será tan mágico estar en la parra
Me gustaMe gusta