LOS CHICOS DEL CORO

4:::octubre:::2013

Escribo pellizcado por este film y sobre todo por su música.

Podría haberlo guionizado Dickens, Capra, Disney o hasta el mismísimo Francisco de Asís cantando a los pajaritos. Tanta dulzura no me resulta sin embargo empalagosa, pero sí increíble. Qué importa.

No soy muy amigo de esas buenas voluntades que pavimentan el infierno, pero quiero creer, esforzándome mucho y siendo desleal a los destrozos que identifico en mi corazón, que algunos buenismos funcionan como propósitos regulativos, esto es, como sueños utópicos.

Aunque a estas alturas de mi vida, y me duele, las utopías ya me la pelan.

Esta película miente con avaricia, pero esa secuencia de los aviones de papel… Y esas voces de los chicos del coro.

Une caresse sur l’océan

http://youtu.be/rEs1wtsw_IA

© Six Roy

12 Responses to “LOS CHICOS DEL CORO”

  1. Nahia Says:

    Es bellísima… Bellísima… Trouve un chemin vers l’arc-en-ciel…
    Se découvrira le printemps… El color es luz, sus voces son luz. Quizá de ahí ese «pero» que surge en el quinto párrafo casi sin querer. La música nos hace sentir la caricia del aire impregnado de esperanza, nos permite elevarnos un instante, creer que quizá esa utopía deje de ser para ser.

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  2. coeliquore Says:

    Está en mi lista de películas favoritas. Una vez dije, y me reitero, que si el cielo existe, en él estarán estas voces, esta historia.

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  3. Atticus Says:

    Tengo prejuicios, lo confieso. Las pelis de profes no me ponen. Me sé la historia: profesor que lucha contra las circunstancias, el poder establecido, las autoridades, blablabla… Lo he visto en «Rebelión en las aulas», en «El club de los poetas muertos», en «La clase»… Demasiadas veces.

    Aquí la novedad es la música. Sólo por ella merece la pena ver la película. Pero la evoco ahora y me doy cuenta de que es muchísima la belleza pura que hay en ella. Pero del resto…: las mismas trampas, las mismas verdades a medias, la misma sensación de irrealidad bienintencionada (y peligrosa).

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  4. Dawn Says:

    Es una película preciosa, de mis favoritas.
    Seguramente miente, pero aun no estoy lo suficientemente decepcionada para dejar de creer en la utopías, menos aun cuando de fondo suena tan maravillosa música.
    «la musique peut changer les gens».
    A pesar de tener una historia muy bonita, lo mejor de la peli son las composiciones de Bruno Coulais, son brillantes, no me cansaría jamás de escucharlas, ni de tocarlas. Pero no todo el mérito es de Couilais, la preciosa voz que tenía entonces Jean-Baptiste y demás niños del coro han sido claves.
    Un saludo.

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  5. paraqueloleas Says:

    Totalmente de acuerdo con Atticus. Pero por favor, amo del blog, no le borres «pese a las circunstancias». Me gusta eso de ir «contra» algo «pese» a ese algo mismo 😉

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  6. CrisC Says:

    Lo es, Nahia, bellísima. Ese pero…, quizás, no sé: mejor no fiar en utopías. La música puede ser tan bella como equívoca.

    🙂

    Esas voces podrían ser la b.s.o celeste. Y si no…, también, Coéliq.

    🙂

    Esta música justifica la película. Cierto, Atticus. Lo demás, sí, está visto y, sin embargo, esos aviones de papel.

    🙂

    Celebro que esté entre tus favourites films, Dawn. Y cómo nos empuja la belleza de la música a creer en nuestra especie… El viejo Platón hubiera pateado en el cucu a estos músicos. Esa voz de Jean-Baptiste…

    🙂

    He de atender a la demanda de Atticus, Páraq, pese a las circunstancias. Firmado, El Amo Luk.

    🙂

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  7. Romi Says:

    Quisiera abrir una «tercera vía» (parezco Durà) entre la deliciosa mentira y la posible utopía (¿oxímoron?).
    Hace muchos años que la vi y mi recuerdo es parcial, pero recupero la idea que me rondó en aquel momento: cómo la humanidad de determinados seres, manifiesta incluso en los contextos más adversos, construye las pautas de la transformación social. Aquella escuela no era un lugar especialmente malvado, era el fruto de una sociedad y su concepto sobre la educación. La sensibilidad y visión de aquel maestro será prolegómeno del cambio social.
    Cambio complejo, bidireccional, y posiblemente lento para sus protagonistas, pero no inútil para la sociedad que lo experimenta.

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  8. CrisC Says:

    De oxímoron en oxímoron y tiro porque me toca.

    Del compromiso personal a la transformación social, toda una candorosa ingenuidad que delata la etiología de nuestra cultura y todo un programa político.

    Esos maestros de cine, Romi, ésos que tuvimos…

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  9. Rubén Says:

    No la he visto, pero creo entender que es voluntariosa y por eso genera un sentimiento dual y contradictorio.

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  10. CrisC Says:

    Esta peli es voluntariosa, Rubén, y peligrosa. O una delicia. Pero hoy no voy a renunciar a contradecirme (al menos hoy).

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  11. Josevi Says:

    Curiosa película, la vi en casa de un amigo, efectivamente mueve los «sueños utópicos».

    Respecto a lo de: «las utopías ya me la pelan» me has dejado perplejo

    El otro día escuche a E. Galeano una frase muy acertada a mi entender (atribuida a un tercero) sobre la utopía. Esta decía más o menos: «la utopía es inalcanzable, cuando das un paso hacia ella, ella se retira un paso. Pero es lo que nos hace caminar»

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  12. CrisC Says:

    Mueve a la emoción, cierto, peligro.

    Perplejo…, hummm, socio, ya sabes que va en mi línea. Conozco la frase de Galeano y la he utilizado, es muy ilustrativa de lo que significa la Utopía.

    Esas utopías, sueños de la razón, que se tornan distopías y hacen sangre. No obstante…

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